Ricardo Veltri
Hacia principios del siglo III a.C. Roma se encontraba en expansión en la península itálica. En 282 a.C., con la intención de ayudar a la ciudad de Turios en contra de los lucanos, rompe el tratado de no navegar las aguas del golfo de Tarento, siendo esta ruptura del pacto el casus belli que desató el enfrentamiento que consolidaría su poder sobre el sur de la península: las guerras pírricas. Estas fueron así llamadas por la intervención del rey Pirro de Epiro, en favor de la ciudad griega de Tarento, una de las potencias comerciales del sur de la península.
Hacia el año 280 a.C., en el contexto arriba mencionado Roma adopta su primer sistema monetario, compuesto por piezas producidas mediante fundición en bronce (con contenido de plomo) en forma circular.
Esta artículo fue originalmente publicado en Boletín ADVENTVS, Año 2, Nº2. Abril 2021
